POESIA EN EL MONTE
Cortos poemas
Estoy acostado en la
tumbona, pensándote todo
el rato escribiéndote
cortos poemas, como tu bien sabes
es mi forma de pasar el tiempo.
Cada vez que te dedico
cortos poemas, se me
ocurren varios cientos
por eso es que te digo
al dártelos, que eres
la razon de mis sin sueños.
Cortos poemas para
dedicártelos, y con
una mayor razón ahora
bonita ocasión.
tumbona, pensándote todo
el rato escribiéndote
cortos poemas, como tu bien sabes
es mi forma de pasar el tiempo.
Cada vez que te dedico
cortos poemas, se me
ocurren varios cientos
por eso es que te digo
al dártelos, que eres
la razon de mis sin sueños.
Cortos poemas para
dedicártelos, y con
una mayor razón ahora
bonita ocasión.
SE CONFUNDIO EL SOL
Se confundio el sol.
Se confundio.
Al salir por la noche.
Penso que la luna se habia ido.
Se confundio.
Se confundio.
Al salir por la noche.
Penso que la luna se habia ido.
Se confundio.
CUADO LLORAN LOS CAMPOS
Cuando lloran los campos
lloro yo.
Cuando lloro yo
lloran las aves.
Cuando lloran las aves
lloran las nubes.
Y cuando lloran las nubes
el campo deja de llorar.
lloro yo.
Cuando lloro yo
lloran las aves.
Cuando lloran las aves
lloran las nubes.
Y cuando lloran las nubes
el campo deja de llorar.
EN EL JARDÍN ANOCHECIDO Y ABARICIOSO
En el jardín anochecido y abaricioso
le contemplaba el fruto escandaloso y pesimo
desde el arbol silencioso y comparativo
al lado de la flor amarillada y alargadica
encima del riego estrellado y electrocutado.
le contemplaba el fruto escandaloso y pesimo
desde el arbol silencioso y comparativo
al lado de la flor amarillada y alargadica
encima del riego estrellado y electrocutado.
Un mundo mejor
Van los pajaritos
hacia el parque.
Cantando
sus alegres canciones
Van buscando
un mundo mejor.
Y en el parque
lo encontraran.
hacia el parque.
Cantando
sus alegres canciones
Van buscando
un mundo mejor.
Y en el parque
lo encontraran.
Su alma
El gato que cantaba con su mirada
El deseo de su alma
Su sombra oscura y olvidada
Como la noche que ayer llegaba
Cuando miro al cielo
Gris como su espíritu
vio su reflejo en la oscuridad
que hoy llama.
El deseo de su alma
Su sombra oscura y olvidada
Como la noche que ayer llegaba
Cuando miro al cielo
Gris como su espíritu
vio su reflejo en la oscuridad
que hoy llama.
Poema a septiembre
El final del verano
Regresa el otoño.
Y con él el inmenso frío
De las noches oscuras.
Los charcos marrones
Cubren las calles.
Los pájaros expanden sus alas
Y planean hacia lugares más cálidos
De este planeta llamado Tierra.
Vuelven los madrugones
Y el tráfico en las calles.
Este es el mes de septiembre.
Regresa el otoño.
Y con él el inmenso frío
De las noches oscuras.
Los charcos marrones
Cubren las calles.
Los pájaros expanden sus alas
Y planean hacia lugares más cálidos
De este planeta llamado Tierra.
Vuelven los madrugones
Y el tráfico en las calles.
Este es el mes de septiembre.
Petenera
Rompe telarañas llorando al anochecer
Y los pone a evaporar en el matorral de sus ojos que al estallar
Le juran por los manzanares que les dieron de alimentar
Que van a dejar sin cabeza cada amanecer.
Le rondan las pirañas y se apaña avivando la mirada
Para alejarlas con los parásitos que la quieren masticar
Y ser la niebla de la selva que mira y no deja mira
Penacho de frío deseoso de mi lágrima.
De astillas vacías su ropaje, de copla su sollozo
En chicha seca la carroza que la lleva a sus adentros
La sonrisa encrespada de ir en contra de las corrientes.
Empalma hasta a los tallos que eran firmes antes de ser sustituidos
Y nunca se ha separado con el ruido de la multitud y su coexistir
Amiga de los bichos, como en la copla de David
Que encuentro motivo al alcanzado del lugar del fin
Y los pone a evaporar en el matorral de sus ojos que al estallar
Le juran por los manzanares que les dieron de alimentar
Que van a dejar sin cabeza cada amanecer.
Le rondan las pirañas y se apaña avivando la mirada
Para alejarlas con los parásitos que la quieren masticar
Y ser la niebla de la selva que mira y no deja mira
Penacho de frío deseoso de mi lágrima.
De astillas vacías su ropaje, de copla su sollozo
En chicha seca la carroza que la lleva a sus adentros
La sonrisa encrespada de ir en contra de las corrientes.
Empalma hasta a los tallos que eran firmes antes de ser sustituidos
Y nunca se ha separado con el ruido de la multitud y su coexistir
Amiga de los bichos, como en la copla de David
Que encuentro motivo al alcanzado del lugar del fin